El día elegido no fue del todo malo y es que muchos pasamos el domingo mirando al cielo a ver si se mantenía ese solo que parece que no quiere venir a vernos.
Aun así, la lluvia no hizo aparición y pudimos aprender un poco más sobre los árboles, su corteza, las variedades que existen... también sobre los animales, no solo esos tan exóticos que vimos en Cabárceno, también grillos, babosas, gusanos, ciempiés...
Pero más llamaron nuestra atención las vacas y los terneros de la cuadra, pudimos verles comer y ver como viven.
También tuvimos tiempo para observar la fauna de la ría, y después de comer unas dinámicas y juegos para afianzar todos los conceptos que habíamos estado escuchando toda la mañana.
VIKINGOS
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